domingo, 14 de junio de 2015

Peñalsordo renueva en el cargo a su pretérito alcalde.


  • Tras la toma de posesión y proclamación como nuevo alcalde
  • Un "gesto" de desprecio para la historia de la democracia. 


Tras la proclamación del Alcalde Juan Antonio Serrano Muñoz.


Por Pedro Galán:

     En el salón de sesiones del Ayuntamiento de Peñalsordo, en cumplimiento de lo establecido en el artículo 195 de la Ley 5/1985, se citaron los 9 concejales para tomar posesión de su cargo, constituir la nueva corporación tras acreditar sus credenciales, suscribir las oportunas declaraciones de causas de incompatibilidad, bienes patrimoniales, etc. 

    Todo parecía transcurrir con normalidad. En presencia de los vecinos que llenaban a rebosar el foro, cada concejal fue pasando por el atril jurando o prometiendo cumplir con sus obligaciones constitucionales y ponerse al servicio del Rey, para después elegir al nuevo alcalde mediante voto "secreto" depositado en una urna demasiado grande para tan pocas papeletas. 

     En fin, resultó elegido alcalde Juan Antonio Serrano y acto seguido, el saliente, le preguntó si aceptaba el cargo – Sí, claro -  y empezaron los aplausos.

     Normalmente cuando alguien empieza a aplaudir todos los presentes imitan el gesto incluso inconscientemente, por eso me llama la atención lo que ha ocurrido hoy, que por los aplausos se pudiera identificar tan nítidamente el color negro del luto frente al blanco de quienes se sienten de nuevo bautizados… Los del negro no aplaudían.

     Aún no había acabado el acto de constitución y traspaso de poderes, porque aunque la proclamación del alcalde ya se había realizado, y aplaudido, aún  quedaba el EXAMEN DEL ACTA DE ARQUEO E INVENTARIO GENERAL DE BIENES,  a fin de dar cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 36.2 del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, que obliga al Secretario-Interventor a tomar las medidas precisas para que el día de la constitución de las nuevas Corporaciones Locales “se efectúe un arqueo y estén preparados y actualizados los justificantes de las existencias en metálico o valores propios de la Corporación, depositados en la Caja Municipal o entidades bancarias, así como la documentación relativa al inventario del patrimonio de la Corporación y de sus Organismos autónomos”.

Pues Señores, ustedes perdonen si nos quieren perdonar.....
Pero los concejales del PP nos vamos a ausentar....

¡Vaya mogiganga que nos han brindado!
Lástima que acaba de pasar el Corpus.

     Efectivamente, aún no acabo de salir de mi estupor, los del PP se LARGARON sin terminar el traspaso de poderes "como alma que lleva el diablo", dejando sin cumplir las obligaciones constitucionales que acababan de jurar,  no digo ya sus obligaciones éticas o dignidad personal, que a la postre han sido nulas.

  Me recuerda a la huida que dio el cacique cuando el viejo maestro republicano, protagonizado por Fernando Fernán Gómez en "La lengua de las mariposas", quiso dar su discurso de despedida el día de su jubilación.

     Pero eso fue antes de la guerra civil, ahora estamos en 2015, y aún queda gente así que no sabe vivir en democracia y parece que no va a aprender nunca.  A mi juicio, aún más grave que el feo gesto a la corporación entrante y la falta de respeto a sus propios votantes, es el desprecio más absoluto en cumplir con las obligaciones de su cargo, y no es ni más ni menos que cumplir la ley.  Por eso mi mejor consejo es que dimitan, que aprovechen el tirón de la desbandada para no volver más por el Ayuntamiento en los cuatro años de legislatura.

     Creo que lo acontecido hoy en Peñalsordo no ha ocurrido en ningún pueblo de España en toda la historia de la democracia.  Es más, considero que el nuevo Alcalde ha sido perfectamente proclamado, pero sin haberse cumplido con el acta de arqueo, entre otros protocolos, no pueden considerarse traspasados los poderes del Ayuntamiento, en rigor.  Tanto es así, que más allá del bochornoso espectáculo ofrecido por estos señores y señorita en la primera anécdota de su mandato, puede acarrearles más de un dolor de cabeza. Van a pasar muchos años y aún se recordará este desdeñoso gesto que dejan como herencia a los futuros candidatos y simpatizantes del PP. Lo siento por ellos.

     Bueno...como se fueron de la sesión sin acabar, les cuento lo que siguió a la estampida.  Sintiéndose en casa, arropado por su gente y desde la misma tribuna que dejó hace cuatro años, Juan Antonio Serrano ha agradecido la confianza renovada que su pueblo le brinda y ha recalcado, dirigiéndose a sus concejales, que no pueden permitirse fallar en su nueva tarea de gobierno. Así sea.

La fiesta de la democracia continúa, pese a los pesares y a los ausentes.